viernes, 27 de junio de 2008

INJUSTICIA DELIBERADA

El año pasado se aprobó una ley para, en teoría, conceder a las parejas homosexuales los mismos derechos que a las heterosexuales. Derechos fiscales, derecho de adopción e incluso la denominación de matrimonio para las parejas formadas por personas del mismo sexo.

Considero que lo normal en la especie humana son las parejas heterosexuales, igual que en cualquier otra. Es cierto que en los animales a veces hay casos de homosexualidad, pero son la excepción que confirma la regla. Por ello, no estoy de acuerdo con la corriente progre que nos invade y afirma que la homosexualidad es algo normal e incluso positivo, simplemente una opción más, como quien decide ir de vacaciones a un sitio o a otro.

En el supuesto de que se considerase la homosexualidad como algo normal, también deberían considerarse así otras opciones sexuales tan raras y aberrantes como seamos capaces de imaginar, y conceder a las parejas basadas en esas "opciones" los mismos derechos que a las heterosexuales y homosexuales.

¿Por qué no permitir el matrimonio, por ejemplo, entre un hombre y una tortuga? Y permitir que que ésta pueda heredar de aquél la casa, el coche y las cuentas bancarias, amén de hacerse cargo del niño que ambos tuvieron a bien adoptar. O un ejemplo real como la vida misma, como el de dos hermanos solteros que no pueden obtener las mismas ventajas ni fiscales ni de ningún tipo que una pareja homosexual porque no se les permite contraer matrimonio.

Mientras esto no sea posible, entiendo (sin ser experto en Derecho) que la ley mencionada al principio es totalmente injusta, y otorga privilegios a las parejas homosexuales frente a otros tipos de parejas. ¿Dónde queda la igualdad? He aquí una buena razón para hablar del tema.

14 comentarios:

Anónimo dijo...

Estoy totalmente de acuerdo con lo expuesto en esta entrada...

Me parece que se acepten unas tendencias y otras no no es medio normal, porque todo se amparan en tema de prejuicios...si tan liberal es la gente por q no el todo vale?...la homosexualidad es el principio del fin de la sociedad humana ya que anula el crecimiento y evolución natural de la especie ya que evita la reproducción.

Aunque pensándolo bien lo de una persona con una tortuga, estaría bien porque heredar la casa de la tortuga...con los precios de los pisos y seguro que es mas grande que algunos pisos de esos q nos venden como "normales" de 30 metros...

Teutates dijo...

No confundamos churras con merinas, aun siendo de la misma especie...
Una cosa es que se pueda ver a los homosexuales u homosexualas o a las lesbianas o lesbianos (perdón, estoy confundido con el lenguaje, siempre se me pegan pronto los acentos), como ciudadanos normales, a la hora de ir a la compra, de solicitar una subvención, recibir una herencia, ir al fútbol, "vivir y desarrollar su sexualidad" o irse de copas; todos derechos unilaterales que no afectan a nadie más que a ellos mismos, y otra cosa muy distinta es concederles derechos en los que participan otras personas que pueden tener intereses diferentes, y en este caso además sin capacidad de decisión como son los niños.
Es decir, al igual que en un contrato en el que existe una relación bilateral, en el tema de la adopción, por un lado estará el derecho a adoptar, y por otra el derecho a ser adoptado, en este último caso el adoptado no puede elegir si quiere serlo por una pareja hetero o por una homo/lesbi, ante esta incapacidad de decisión, y dado que los niños no son cobayas, (aunque al paso que va esto de los derechos de marginados y minorías sobre los demás, las cobayas, en breve, tendrán mas derechos que los niños), no se ha de hacer experimentos con ellos y por tanto ante la imposibilidad de elegir de los niños, lo normal es que se opte por que puedan tener un entorno lo más natural posible, es decir un padre y una madre.
Me parece fenomenal que un homosexual o una lesbiana deseen y quieran verse como personas normales, pero es que desgraciadamente (para ellos) no lo son, podrán ser todo lo felices que quieran, podrán aspirar a todos los derechos que deseen, pero siempre y cuando, su anormalidad se la queden ellos, y no se la hagan "sufrir" a otros, y menos siendo estos otros niños.

Perlimplín dijo...

Permítame que puntualice: lo que ha sucedido con la Ley 13/2005, del "homonomio", no es que se haya concedido derecho alguno a los homosexuales, sino que, en puridad, se ha eliminado la figura del matrimonio del Código Civil.

El matrimonio es una institución con reconocimiento jurídico desde la más remota antigüedad, caracterizado porque tiene que ser entre un hombre y una mujer y con nota de permanencia en el tiempo.

Lo que se ha hecho con la Ley 13/2005 es eliminar las menciones al "hombre y la mujer" en el Código Civil.

Propiamente es una Ley de derogación del matrimonio.

Al Neri dijo...

Muy buena la entrada, Leonardo. Pero yo añadiría: ¿Y la poligamia qué?, ¿por qué no se legaliza en España?, ¿qué pegas hay?, ¿es inmoral?, ¿está feo?, ¿no es una forma de vida sexual igualmente respetable?

Anónimo dijo...

Hola buenas, ¿porque yo no tengo los mismos derechos que una pareja de GAYERS?.

Me parece una injusticia puesto que yo como superheroe que soy encima no tengo ni seguridad social, ni puedo acceder a un piso de protección oficial puesto que vivo en las cloacas.

Y me pregunto. ¿Porque el ejemplo de un hombre con una toruga. Si a mi me gusta Abril O´Neil, la periodista.

Y una segunda si una Tortuga se lia con otra Tortuga? Somos Gayers o Lesbianas. Y de ser así tendriamos derechos o sería otra vertiente.

Anónimo dijo...

Donatello deja de decir chorradas y vamos a pedir unas pizzas.

Que se te va mucho la pinza (anda igual eso es un expresión de gay).

Anónimo dijo...

Una pregunta a los machotes hetero:
¿Sería un gesto homosexual que mientras hacéis el amor vuestra amante/novia/mujer os metiera un dedito en el culo?
¿Sabéis que uno de los puntos más estimulantes de los hombres está como unos 6 cm. dentro del culete?
¿Sería esa una práctica indebida o solamente sería indebida si quién introduce la falange por el ano es un chicazo?

ignatus dijo...

Antes de nada quiero felicitar a todos los participantes del blog por haber respetado escrupulosamente el partido España-Rusia, y no haber intervenido durante la retransmisión del mismo. ¡ESO ES PATRIOTISMO!

Si bien discrepo de muchas de sus opiniones al respecto (y en algún caso de las formas), felicito al cuatrivirato por la elección del tema de esta semana, pues pienso que hay mucho “tabúes” en España sobre los que no se ve bien hablar y la homosexualidad es uno de ellos.

Respecto al tema que se plantea, sin ser especialista en derecho, corríjanme si me equivoco demasiado, el problema del matrimonio entre un hombre y un animal no racional está en que esta figura jurídica es un contrato y, como tal, se exige a las partes capacidad de contratar y entendimiento de lo que se acuerda. Esto no se puede presuponer en el caso de los animales (ni en el de las personas que tengan su “entendimiento” seriamente mermado, como en caso de retrasados mentales severos) y por tanto cualquier contrato (del tipo que fuese) con un animal sería nulo.

Según esto, no debería haber problema (en cuanto a contratar) en lo que inteligentemente refiere al neri respecto a la poligamia: supongo que el rechazo social que nos produce es porque la entendemos como una costumbre extraña / “mora” con la que se ha degradado siempre a la mujer (pues siempre se ha visto a un hombre con varias mujeres). Estoy espeso y no se me ocurren argumentos ni a favor ni en contra, pero la verdad es que, si bien legalmente no hay figura jurídica que la contemple siento mucha envidia cuando veo al puto viejo de la revista playboy siempre rodeado de tres macizas siliconadas, y yo sólo tengo una (una maciza, digo, no es que mi mujer esté siliconada ni nada de eso… vamos, que no es que me parezca mal,… bueno, corramos un estúpido velo)

Personalmente, sí considero la homosexualidad algo anormal entendido como “desviación de la norma”: esa norma lo es porcentualmente (cualquier minoría escapa de “la norma”) y naturalmente (ya se ha comentado que la tendencia natural/genética de la especie es a la supervivencia y obviamente la atracción sexual que conduzca a la reproducción es por ello la norma).

Ahora bien, no son “anormales” en ningún otro aspecto –social o jurídico, por ejemplo- salvo que así lo determine la propia sociedad (pues es en estos campos quien marca las reglas).

Esa anormalidad se circunscribe, por tanto a los aspectos que he dicho.

* “Porcentualmente” es algo que a nadie debe preocupar (también son minoría los millonarios, los superdotados, los retrasados mentales, los cojos… y eso no es ni bueno malo);

* Desde el punto de vista “natural”, se ha dicho que la homosexualidad es “el principio del fin” por anular la pervivencia de la especie. A este respecto quiero exponer 3 cosas:
1 - no es contagiosa y por tanto no hay riesgo de pandemia (ni aunque se haga proselitismo de ella);
2 – Existe sobrepoblación mundial (o riesgo de ella, en realidad, pues a fecha de hoy lo que hay es un desigual reparto de recursos, pero eso es otro tema), y no importaría si nacieran muchos menos niños. De hecho quién sabe si, como la naturaleza es sabia (como se ha comentado en algún post) no será un mecanismo natural de la especie para la autorregulación (hay animales, como ciertas ranas que cambian de sexo si en su entorno hay exceso de miembros de un determinado género)
3 – La pervivencia de la humanidad está, en mi opinión, sobrevalorada pero aunque fuese importantísima, en cualquier caso, no debe recaer en personas individuales (“¡tú, a reproducirte por decreto!”) sean homosexuales o no.

Resumiendo, entiendo que la homosexualidad es la excepción, pero que como otras muchas excepciones no es en sí misma ni buena ni mala y por tanto no debe ser privativa de derechos.

Siento el rollo, pero tenía mucha letra que escribir tras unos días pegándome con el cuatrivirato por conocer los derechos que nos amparan a Ustedes y a mí en este blog (hacia el final de los comentarios- 27 de junio de 2008 15:31- está el resumen).

Gracias por llegar hasta aquí. Saludos.

Anónimo dijo...

Leonardo, plantear lo de la tortuga me parece una chorrada que no viene a cuento. Sabes muy bien que los animales, como muy bien señala Ignatus, carecen de personalidad jurídica, y es estúpido plantear que haya matrimonio, herencias, etc. En cambio, entre dos varones puede existir una relacion afectiva analoga a una relacion heterosexual que si merezca derechos.

Anónimo dijo...

Sefo, yo tambien creo que es muy tonto y demagógico poner como ejemplo una pareja hombre-animal para preguntarse por qué dicha pareja no pueden casarse y tener otras ventajas fiscales o hereditarias. Lo que no me parece nada tonto es preguntarnos por qué el deseo de un varón por un varón o de una mujer por una mujer pueden verse como normales y en cambio la atracción sexual por un animal, no. De hecho ambas tendencias sexuales existen y se practican (homosexualidad y zoofilia), no son naturales ni son para procrear y se apartan de los instintos naturales. O sea, al margen de que se casen o no se casen el hombre y la tortuga ¿por qué consideraríamos un pirado a quien viviera con una tortuga y tuviera sexo con ella, pero sin querer derechos, y no a quien hiciera lo mismo con alguien de su mismo sexo?

Veneficus dijo...

No voy a abundar en lo que ya he expuesto anteriormente. Sólo decir que estoy de acuerdo en lo expuesto por Leonardo, donde el ejemplo extremo de la tortuga es sólo un caso de zoofilia, como otra desviación sexual, independientemente de si es contrato legal, es consentida, etc.

Como bien dice al neri, si se ve como normal la homosexualidad deberían verse otras desviaciones como el sado-masoquismo o la poligamia. En una ocasión, hablando sobre esto le puse este último ejemplo a una amiga y me dijo que no, que eso iba contra la igualdad de la mujer, pero que la poliandria le parecía bien. Precisamente creo que la poligamia sería mucho más discutible que sea una desviación sexual, ya que es común en muchas culturas y mucho más aún en la naturaleza.

Gurney Halleck dijo...

La solución a la desigualdad es la abolición del matrimonio. Lo digo en serio. Y el ejemplo de la pareja de hermanos discriminada vale comparada con una pareja de homosexuales o de heterosexuales.

Si el problema es dar unas ventajas fiscales a personas que conviven o dependen económicamente unas de otras, creemos un contrato de convivencia que regule estas ventajas y acabemos con el matrimonio.

Este contato podría ser usado por cualquier tipo de "familia": tres estudiantes compartiendo piso, ancianita con nieto, pareja heterosexual, pareja homosexual... qué le importa al estado la relación sentimental entre los miembros, se trata de regulaciones fiscales.

Isel dijo...

Como ha dicho Teutates, son diferentes tipos de contratos.
Un matimonio es un contrato entre iguales, dos seres racionales que basándose en el amor quieres formar uan familia. Bajo esta definición puede caber muchas formas. Lo que se ha hecho es quitar hombre y mujer, ya que el amor puede darse entre personas del mismo sexo aunque no puedan procrear, pueden tener sentimientos de amor el uno por el otro similares a una pareja heterosexual. Otro tipo de relaciones no se podrían tratar igual, ya que no existe ni ese sentimiento ni esa vocación de formar familia. Y mucho menos si hablamos de relaciones zoofílicas ya que uno de los componentes no está en igualdad de condiciones, eso es otra cosa, pero no matrimonio.
Tradicionalmente se ha llamado matrimonio a lo que todos nos suena matrimonio, pero para personas del mismo sexo también podría ser, salvo por la posibilidad de procreación, aunque habría que ver la posibilidad, dudosa por mi parte de la adopción. Sé ve que estoy a favor del matrimonio homosexual con todas las ventajas que pueda tener otro heterosexual con la salvedad ya dicha, aunque si querís lo podemos llamr de otra manera...

Manuel dijo...

Creedme, soy consciente de que el "matrimonio" entre un hombre y un animal hoy por hoy no es factible. Se trataba de un ejemplo extremo y absurdo, pero ha cumplido perfectamente su objetivo. Gracias.