domingo, 13 de marzo de 2011

LA RED SOCIAL

Ayer, por fin, vi la película que más me apetecía ver esta temporada. Mi curiosidad no venía tanto de sus muchas nominaciones y los tres Oscars recibidos, sino de mi fascinación por la gente capaz de hacer mucho dinero solo con su talento, de mi reciente descubrimiento de Facebook y del inquietante subtítulo del cartel: “No haces 500 millones de amigos sin ganarte algunos enemigos”.

Creo que el argumento, basado en hechos reales, es sobradamente conocido. El joven judío Mark Zuckerberg, un genio de la informática que estudia en Harvard, tiene un ego desmesurado que le lleva a adoptar una actitud elitista y de desprecio hacia el resto de alumnos. A pesar de ello, no pasa de ser un friki lleno de complejos que fracasa una y otra vez con las chicas y apenas tiene amigos. Tras demostrar sus habilidades como hacker y creativo con una gamberrada contra el sistema informático universitario, tres compañeros acaudalados y deportistas de éxito le ofrecen colaborar en un proyecto original: diseñar una aplicación tipo red social para alumnos de Harvard, en la que los propios usuarios meterían sus datos personales e invitarían a sus amigos a unirse a la red. Deslumbrado por la potencialidad de la idea y guiado por su resentimiento, Zuckerberg registra por su cuenta una web mucho más ambiciosa y funcional (Facebook) gracias a la ayuda económica de su amigo Eduardo Saverin, al que nombra director financiero y partícipe de la embrionaria sociedad. Muy pronto, el éxito internacional del invento genera cientos de millones de dólares y Mark es demandado judicialmente por partida doble: por los enfurecidos dueños de la idea y por Eduardo, que aún no ha visto un solo dólar.

No puedo negar que la peli me ha gustado mucho y además me ha hecho gracia el extraordinario parecido físico y psíquico del protagonista con un conocido mío. Pero sin ánimo de enrollarme, quiero comentar tres aspectos concretos:

- Se trata de una película con un guión fabuloso (en especial los diálogos) que sin embargo tiene un ligero handicap: No es fácil de entender para espectadores sin unos rudimentos mínimos de informática (mi caso) y quizá de derecho societario y de propiedad intelectual. Quiero decir que el argumento se sigue bien, pero sin estos conocimientos se pueden perder multitud de matices y notas de humor.

- Mientras disfrutaba de esta cinta de David Fincher no podía dejar de pensar en la relación que en el mundo de la empresa debería existir entre capital y trabajo (o, en este caso, ingenio). Las preguntas que me hacía son: ¿Habría sido justo que Eduardo Saverin se forrara el resto de sus días sólo por haber prestado unos dólares a Zuckerberg para albergar los servidores en la primerísima fase del proyecto, careciendo como carecía de capacidad y de creatividad? ¿Debe prevalecer el patrón dinero sobre el patrón trabajo, sobre la valía, el esfuerzo y la inteligencia?

- Lo mejor de la peli, por encima de sus virtudes puramente cinematográficas y de la actualidad del tema Facebook, es su mensaje ético. Para mí se trata de una interesante parábola contra la vanidad y la soberbia. La gran moraleja del guión es que de poco sirve ser el más listo, destacar sobre todos e incluso triunfar económicamente si no amas a nadie ni nadie te quiere más que por el interés, y todos te ven como un capullo y un pretencioso. La mejor escena para mí es el diálogo inicial entre Mark y su novia, que le deja porque el genio le suelta que estando en la Universidad de Boston no le hace falta estudiar. Antes de plantarle, la chica le dice a la cara:

"Seguramente llegarás
a tener mucho éxito como experto informático, pero vas a ir por la vida pensando que no gustas a las chicas porque eres un friki. Y yo quiero que sepas de todo corazón que eso no será verdad; será porque eres un gilipollas".

12 comentarios:

Anónimo dijo...

Al final me vas a tentar para verla, jejeje...
Yo creo que para hacer enemigos no hace falta haber hecho 500 amigos antes.

mujer prevenida vale por dos dijo...

El joven hombre del año segun la revista Times (pese a que los lectores votaran a Julian Assange) es un cabronazo con pintas, codicioso, falso, y ladron que traiciona a su único y mejor amigo por dinero además de apropiarse de la idea de facebook; es por eso que tiene que pactar extrajudicialmente y pagar tanto a los que les roba la idea como a su amigo incluyendo en ese pacto sendas cláusulas de confidencialidad.

Por cierto mientras la CIA y el pentagono favorecen facebook (porque vamos como borregos a dejar nuestros datos contactos relaciones y fotos...) persiguen al wikileaks

El último de Filipinas dijo...

Después de ver lo acertado del comentario de Mujer prevenida vale por dos, he acudido a mi cuenta de Facebook y lo he rellenado de datos falsos.

que dificil la vida sin ti dijo...

Buenos días.
Yo no tengo facebook, ni twitter, ni nada excepto mi blog que mantengo porque escribir me proporciona muchas satisfacciones.
Pero exponerme a la voracidad de intimidad a veces tenebrosa de la Red me aterra.
Le aseguro que a causa de la convicción que emana de su entrada veré la película, hasta ahora me daba cierta pereza, e incluso tal vez la disfrute.
O acreciente mis recelos y temores, ¡qué se yo!
Muchas gracias, sr. Neri.

Anónimo dijo...

Y la ex le quitó de amigo en el "feis", eso sí fué una puñalada trapera.

LANGOR dijo...

Buenas:

Respecto al caso que plantea del que puso unos pocos dolares, creo que si que seria correcto que se hubiera forrado porque puso el dinero cuando nadie mas quiso ponerlos.

Un saludo

que dificil la vida sin ti dijo...

He pensado en añadir que yo no creo que se pueda cimentar una amistad sólida únicamente por el trato a través de Internet.
Cierto que en mi corta experiencia en la blogosfera que me parece interesantísima, admiro a algunos de ustedes por la brillantez y coherencia de sus entradas y comentarios e incluso la identificación con lo que exponen, sobre todo cuando son sentimientos, hace que se produzca una identificación muy plena que no sabría como calificar.
Pero la amistad afectuosa y cercana es como el amor epistolar.
Falta el vis a vis - nada que ver con el carcelario :-) - de una mirada cómplice, un alzamiento de cejas o la clave de una media sonrisa.
Sin embargo, Neri, con gusto le llamo "amigo" porque la personalidad de alguien que adivinas a través de sus escritos puede llegar a caerte francamente bien.
Hasta pronto

El Subdirector del Banco Arús dijo...

Anda... Que ir a ver una peli sobre un judiorro con pintas. Lo que me extraña es que aparezca como un tipo malvado y gilipollas siendo rico y judío.

Al Neri dijo...

Mujer prevenida tiene mucha razón. Lo que pasa es que también Facebook se usa muy a lo loco. La peña cuelga todos sus datos y todas sus fotos al buen tuntún y a la vista de todos. A mí me parece una herramienta interesante su se utiliza con cabeza y pones solo lo que te interesa poner y compartes solo lo que te interesa compartir.

Perroviejo, no joda la peli al personal y además no es así como lo cuenta. La novia no le quita de amigo del Facebook, sino que simplemente no le acepta la invitación

Asun, gracias.

No he dicho en el post que la peli tiene un error que yo considero muy grave. Cuando los hermanos pijos del remo le ofrecen colaborar en el proyecto de la red social, le habían contado previamente en qué consistía la web. ¿Por qué aceptó colaborar? Le habría bastado decir que no y luego diseñar el programa y registrarlo. Nadie le podría haber acusado de nada, ya que, entre otras cosas, no habría ninguna prueba de que le habían contado la idea.

Esta pregunta se responde fácilmente conociendo la historia real de lo que pasó pero no viendo la película, al menos eso pienso yo.

Anónimo dijo...

Creo que tengo un caralibro cerradísimo, de todas formas voy a volver a revisar la configuración de seguridad.

Sr.Neri inténtelo hombre, lo de sus ex-novias y el face, pero si le aceptan de amigo no las ponga a todas en un mismo apartado que se llame EX porque posiblemente la lie gorda.
Ah y si hubiera jodido la peli (que lo dudo) habría sido de pura casualidad porque no la he visto.

Aprendiz dijo...

Yo no creo que el que puso el dinero debiera forrarse por ello, pero lo que está claro es que muchas ideas se quedan sólo en éso porque no hay nadie que las financie.

Zorro de Segovia dijo...

qué gran reflexión de soldado vikingo!!!

por cierto, a lo largo de la Historia el judío solía ser el que ponía la pasta y luego machacaba a intereses al de la idea. Cambio de tendencias ?