Esta película rebosa valores, es muy católica sin
incurrir en ñoñerías y siempre la tendré en mi lista de predilectas, pero apenas sé
nada sobre su inolvidable banda sonora, de James Newton Howard, que fue
uno de sus aspectos más elogiados por la crítica. La fui a ver el cine el mismo día
de su estreno, en 1993, y desde entonces no se han borrado de mi memoria la
versión del Ave María de Schubert y el tema principal, que casi me hizo saltar
las lágrimas. Disfrutad unos minutos con él, sobre todo a partir del minuto 1:05 del vídeo.
miércoles, 23 de octubre de 2013
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3 comentarios:
Bueno,la música preciosa,gracias por ponerla.A mi me encantó esta peli,porque al ser un hecho real,te hace ver de lo que somos capaces en situaciones desesperadas.El hombre no es capaz de saber la fuerza ni habilidades que tiene,hasta que se encuentra en situaciones límites.
Sólo una puntillosa corrección a su artículo: es Howard, no Haward.
Luxindex, agradecido de su corrección,que incorporo. Si ya decía que apenas sabía nada de la BSO...
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