miércoles, 14 de abril de 2010

MOLESKINE (por Boooz)

Debido a unos comentarios realizados hace tiempo sobre el uso que hago de un modelo de agenda llamado MOLESKINE me piden desde La pluma viperina que haga un comentario sobre ella. Encantado acepto tan sugerente invitación, agradeciendo su confianza.

En concreto no sé
por qué tengo una MOLESKINE. Supongo que por un cúmulo de circunstancias y características. En una reunión en Madrid, con colectivos del Heavy Metal multisectorial, hace más de un año, me fijé en que una señora tenía una agenda muy curiosa que me llamó la atención. Hasta entonces yo había sido el típico fan de la informática-para-todo. Pero la simplicidad y elegancia de la herramienta me llamó la atención: tenía forma de libro encuadernado, con los vértices redondeados, una tira de tela para señalar el día, forrada con un elegante color negro sin marcas ni distintivos, y hojas color hueso, que además se cerraba mediante una goma. Claramente destacaba entre Blackberrys y PDAs. Respondía perfectamente al lema KISS: “keep it simple, supid –o keep it simple for stupids”, y se complementaba perfectamente con cualquier tipo de bolígrafo.

Una persona a la que le gusta rodearse de libros no podía pasarle desapercibido ese artefacto tan elegantemente analógico.

Hace dos años, cualquier persona que se quisiera distinguir en el business “había” de tener una marvellous PDA con e-mail. Y si además era un iPhone, entonces pertenecía a la élite del redil de los distinguidos. Pero el mundo de la informática y las comunicaciones se caracteriza por la democratización y el desfase inmediato. Los que hace dos años dejaban sus cacharros encima de las mesas de los Starbucks, ufanos de la admiración que estaban despertando, hoy los esconden en los bolsillos de sus americanas, no vaya a ser el crío de 12 años de la mesa de al lado tenga uno mejor. ¿Cómo puede distinguirse alguien, entonces, de sus congéneres, sin perder la conectividad?

Aquí aparece el fenómeno MOLESKINE. Como he dicho antes, no tiene nada de especial, y eso es precisamente su gran virtud. Responde a una necesidad en un momento adecuado, que era el de poder lucir bolígrafo, agenda, o estar harto de tener que pasar por quinta vez los datos de una PDA a otra porque la anterior se quedó desfasada y ya no “pega” tanto.

Una MOLESKINE tiene sólo lo que una agenda ha de tener. Nada más. Y está programada para que dure el tiempo que pone que tiene que durar (el de la agenda). Esa es su vida útil.

Yo no me la compré por la distinción, sino porque, aunque rodeado de un mundo digital, soy profundamente analógico: lo anoto todo. Hasta tengo cuaderno institucional de 500 páginas en A4 donde anoto todas mis interactuaciones laborales con personas humanas día a día (que, por cierto, no es MOLESKINE… pero al tiempo…)

El modelo de agenda MOLESKINE que tengo es la Weekly-Notebook Hard Cover Pocket, que en la página impar presenta toda la semana, para realizar entradas en la agenda, y en la par tiene espacio para hacer todas las anotaciones que uno quiera, relativas a esa semana. El tamaño es perfecto para cualquier bolsillo. La complemento con un Plan Cahier Journal, para anotaciones más largas, del mismo tamaño que la agenda.

¿Y por qué MOLESKINE? La historia de la marca me da francamente igual. Me importa un pimiento si la usó Picasso o Hemingway, porque seguro que también, si existiera, hubieran usado un Bic en algún momento, y no por eso Bic es el mejor boli del mundo. Tampoco es por su calidad: el papel es demasiado fino como para usar pluma o Pilot (transparenta, pero a mí no me importa, porque siempre uso los mismos bolis), con el tiempo se deshilacha la tira de tela, y el exterior negro con el tiempo se acaba rascando. Simplemente es porque fue la primera marca que cayó en la cuenta de que había gente que quería un cuaderno o una agenda sencilla, pero elegante. Y ellos fueron los primeros que apostaron de nuevo por este concepto. Y para mí, acertaron. Por eso lo uso, y lo seguiré usando hasta que cambie de opinión.

Por cierto, mi móvil es un HTC Hero, y la agenda la tengo también duplicada en GCalendar por motivos laborales. Pero mi centro de operaciones sigue siendo analógico, por ahora.

30 comentarios:

Rocco Lampone dijo...

Siempre ha sido usted, Sr. Boooz, un tanto bohemio e iconoclasta, todo hay que decirlo.

Yo he sido incapaz de manejar una agenda/moleskine/diario o similar.
La pereza hace que no escriba nada y no lo utilice.

y en tecnologia, pues no le envidio. Mi última adquisicion es un N-97 qeu es un primor y que, por supuesto, aún no se manejar ni exprimir.

marian dijo...

Me regaló una un representante y me encantó.
Necesito apuntarlo todo, antes con el trabajo utilizaba agenda, ahora en casa un calendario en la pared que si lo viesen se asustaban, no hay sitio para más anotaciones.

Al Neri dijo...

Gracias, Sr. Booo, por sus reflexiones analógicas :-)

La primera vez que oí hablar de la Moleskine fue al señor Boooz, que la citó en su blog a principios de este año, pero muy poco tiempo después comprobé que en las más altas esferas de mi entorno laboral casi todo el mundo tenía una. Parecía que se les habían regalado en serie...

He observado lo que se dice en el post de que se está produciendo una especie de involución o moda retro, como actitud casi revolucionaria contra el imperio tecnológico que nos domina desde hace diez años.

Gente a la que hace un año veías en reuniones con el lápiz óptico pinchando en la PDA o en el tablet PC ahora lucen solo su Moleskine y su pluma (sí se puede escribir en pluma en ella).

Aparte de ese sentido “contestatario”, muchos han visto que una agenda, y más si es tan bonita como esta, resulta más elegante y personal que todos los cachivaches electrónicos. Además es un auténtico coñazo estar consultando los archivos en el ordenador, pasándolos de un sitio a otro, encendiendo los portátiles, etc. La libretilla en cambio la tienes siempre a mano encima de la mesa y solo es abrirla, apuntar o leer.

Yo no la tengo, pero me parece muy chula.

Chirly dijo...

Yo uso un cuaderno, libreta o similar de siempre. Necesito tener una al lado de mi teléfono, y no sé entrar en una reunión sin ella.

Sospecho que muchos de los que hoy usan Moleskine lo hacen sólo si es Moleskine; por que han visto al Jefe de Sección usarla; porque Cuca, que es muy guay y siempre está a la última lleva una y yo no voy a ser menos... o razones así. Para mi, que es una moda absurda de esas que se extienden como la pólvora en ciertos ámbitos profesionales, y desaparecen a la misma velocidad.

Siempre he usado cuadernos y libretas, y me niego a usar moleskine a pesar de ser preciosas, sólo por no ser un borrego más.

sefo dijo...

Si, Nery, si, los de las altas esferas son unos revolucionarios y contestatarios que no veas.
A mi me parece una pijería mas y seguro que son mucho mas caras que una agenda de toda la vida.

Miguel dijo...

No dudo de la utilidad de las Moleskine. No tanto por su uso exclusivo como agenda, sino por la posibilidad de satisfacer necesidades alternativas. Esencialmente es fuente de materia prima para pajaritas de papel, moqueros de emergencia, misivas de amor, higienizadores de finales de espalda, pizarras de esbozo de ideas, calzadores de cojeras, diseños aeronáuticos, ..... Aparte de ser pisapapeles de primera y efectiva arma arrojadiza en la defensa personal.

Pero siempre he encontrado incómodo llevar cosas en las manos. Así que cuantas menos mejor. Y si el mismo aparato que uso para hablar remotamente y que transporto en los bolsillos (móvil modelno que ya hemos dicho que se hace imprescindible) me sirve para hacer de agenda, bienvenido sea. Además, la Moleskine no me despierta si duermo fuera de casa, no me permite jugar al ajedrez en el metro y, peor que todo, es también objeto de modas.

El Ctrl-F funciona mal en las Moleskine (los que sabemos que el mejor formato de documentación es el archivo de texto, no podemos vivir sin esta funcionalidad). No hay peor memoria que aquella en la que no se puede bucear en orden. Los Pantones y derivados (foto de la churri incluída) dan falsos tonos en la Moleskine, y el icono de borrar funciona mal. La seguridad del contenido frente a ataques de diccionario es insuficiente (especialmente para víctimas de la Logse).

No sé.... para gustos colores. Aunque pobres daltónicos.

Boooz dijo...

Sr. Rocco: ¿Lo dice por mis tatuajes, mis piercings o por los géneros que perpetro con la Fender y la Tama? (la Sonor sólo para ensayar, igual que la Gibson; la Jackson sólo para hacer un poco el burro). Respecto al teléfono: presumiría si lo hubiera fabricado yo mismo. No siendo así, y pudíendose comprar con dinero, no tiene mérito. Para mí la informática, las PDAs, etc. han perdido toda su poesía...

Sra. Marian: Siempre me han encantado los calendarios de parez (sí, con z) bien repletos de apuntes y anotaciones. Hace todo mucho más hogareño.

Sr. Chirly: sus sospechas son absolutas certezas para mí. Y respecto a su actitud, habla por sí misma (¿por qué limitarse a salirse de la gleba respecto sólo a una agenda, si puede hacer de ello toda una forma de vida...?). Seguiremos en contacto. Estoy muy interesado por el futuro desarrollo de esta idea que acaba de exponer.

Sr. Neri: Es puro pijerío. Lo reconozco. Pero me da igual. Me considero un tipo de letras en un universo de ciencias y me parece un artículo absolutamente romántico, bello en sí mismo, tributo a una época anterior. Conozco a mucha gente, como el Sr. Miguel que dependen vitalmente del Ctrl+? Yo prefiero tenerlo en mi memoria.

Sr. Miguel: no todo lo más eficiente es necesariamente mejor. El mejor sistema para acabar con el hambre en África sería acabar con los africanos, y no por ello es el sistema más humano (eso afirmó un reputado científico en los años 80). Desde luego que es más humano escribir a mano que escribir tecleando. Y desde luego que es muchísimo más humano memorizar y razonar que escribir (a mano o tecleando). Yo procuro no generar demasiadas dependencias con las máquinas (ni con las agendas, sean de la marca que sean).

Sr. Sefo: no hay nada más progre en NY que un billete de un dólar. Y sí, es ma´s cara, pero bueno, en fin, hay una cosa que se llama márketing, y diferenciación, y precio, y elasticidad de la demanda, y, bueno, seguro que usted sabe mucho más que yo sobre todo ello, por lo tanto, sabrá que cuando alguien hace alguna inversión suele calcular esas cosas, para ver si el negocio le sale rentable. Seguro que los actuales compradores de Moleskine hicieron un análisis de mercado, donde valoraron el precio como argumento de compra asociado a diferenciación y calidad (insisto, hablo por hablar de cosas que sé de oidas; estoy seguro que usted sabe mucho más que este humilde tertuliano de blogs sobre esas cosas tan complejas...). El que algo sea más caro suele ser un argumento de compra bastante razonable, en su contexto y bien apoyado.

El Subdirector del Banco Arús dijo...

Alguna vez he intentado tener agenda y llevarla al día. Pero soy enormemente despistado y, cuando no me olvido la agenda en casa no tengo con que escribir en ella (creo que pierdo un boli todos los días) o, simplemente, me olvido de apuntar en ella lo que deseaba hacer.

Sólo pude tener algo similar en mi época de estudiante cuando todavía no era un esclavo de la informática.

Que duda cabe que una agenda y una pluma viste mucho más que las mariconadas de las PDA y cacharros similares.

Por mi parte soy esclavo del portátil. Lo uso para todo. Y eso que mi portátil es muy poco portátil (17 pulgadas y 3 kilos). Esclavo del ordenador, del correo electrónico del trabajo y del Google Calendar.

Ah! Para las reuniones -casi siempre soy secretario en las dos o tres semanales que me esclavizan- llevo un cuaderno cutre de espiral y el primer boli que encuentro o me agencio. Y, en cuanto acabo, paso todo al procesador de texto. Y en el disco duro o en el Gmail se queda porque también soy muy malo archivando papeles.

Al Neri dijo...

Me parecen muy prácticas las agendas en papel.

Tengo dos:

- Una de bolsillo de anillas y recambio anual, donde apunto mis cosas personales. En ella intercalo páginas con anotaciones y tengo varios apartadillos para apuntar pelis a ver, libros a leer, mis restaurantes favoritos, regalos que se me van ocurriendo (luego en fechas señaladas no me acordaría). Al final viene una agenda de teléfonos por orden alfabético donde suelo apuntar más que nada direcciones.

- La agenda de trabajo, sin la que no podría manejarme porque se me olvidarían la mitad de cosas que tengo que hacer. Con esta agenda, de tamaño cuartilla y encuadernada, despacho y me reúno, y me sirve para anotar mis tareas pendientes y mis recordatorios. Las tareas las apunto en la hoja del día correspondiente y cuando las voy liquidando, las subrayo en otro color. Cuando acaba la semana, anoto lo pendiente en la siguiente.

Yo creo que usar una agenda no hay que hacerlo tanto por capricho, porque te guste en sí el objeto, sino cuando existe la necesidad de hacerlo, bien porque seas muy olvidadizo o porque tu actividad laboral te lo exija. Hasta hace relativamente poco yo jamás había usado agenda de trabajo porque en mi puesto no se jugaba con plazos, pero en un momento dado cambié de ocupación y necesitaba controlar muchos temas con periodicidad y tenerlos listos en determinados momentos de la semana, por lo cual si no me apuntaba las cosas el riesgo de cagarla era enorme.

Dulcinea dijo...

Una agenda Moleskine es otra cosa, un signo de distinción, yo este año me compré una preciosa, específica para películas donde vienen todos los apartados de director, óscars recibidos, estreno, etc, y otra que es un cuaderno para apuntar mis cosas pendientes. No se puede comparar con llevar un vulgar cuaderno de anillas, por favor. Cuando sacas el moleskine a todo el mundo le llama la atención, y las pda, portatiles etc a lo mejor son más para trabajo, pero el moleskine es más personal, una elección íntima que te diferencia. Marian, ¿como teneis Moleskines en tu pueblo? Me dejas helada.

Aprendiz de brujo dijo...

Dulci apunta mi imeil en la minipime esa:sololapuntita@hotmail.com

Boooz dijo...

Srta. Dulcinea: jaaaa ja ja ya la voy calando: es usted una provocadora profesional. Me resulta muy simpática y entrañable en sus comentarios tan "atinados"... De otra manera no es posible...

Dulcinea dijo...

Yo a ti Aprendiz de brujo lo que te animo es a que te apuntes en el Moleskine la hora de tus citas con el psicoanalista o con el terapeuta sexual que te vendría muy bien para superar tus obsesiones monográficas desde que escribes en este blog. Como se puede ser tan salido, Dios mío.

Boooz dijo...

Jaaaa ja ja ja aaajj tjo! TJJJO!!! tjo!! (los Davidoff me están matando): "El Moleskine", qué barbaridad... no puedo, no puedo... de verdad que es usted una provocadora entrañable... mire qué le ha pasado a Aprendiz de brujo... ya se ha calentado... anda que sí...

Aprendiz dijo...

A mí las libretas son otra de las miles de cosas que me encantan y me dan ganas de comprarme todas. Me gusta anotar muchas cosas que se me van ocurriendo o que tengo que hacer. Pero por supuesto en una libreta bien bonita, o muy sencilla, pero si son feas no. La moleskine tendría que verla y tocarla, el detalle de la goma me encanta y además es finita. Lo más importante es que guste la organización de la agenda, por semanas nunca la había usado, pero me ha gustado. En fin, que si no es cara, el próximo curso voy con mi Moleskine ;-)

En cuanto al móvil, tengo que reconocer que yo lo compatibilizo todo, también uso muchísimo la agenda del móvil, en cuantos más sitios apuntes las cosas menos posibilidades de que se olviden.

Dulcinea dijo...

Aprendiz, hay muchos tipos de Moleskines, por semanas, por días, etc y hasta las hay de 18 meses en vez de 12.

marian dijo...

Verás Dulcinea......hoy con el día y el susto que he tenído paso de tí como de comer mierda.

marian dijo...

No.
No, esto no está bien, por muy mal que me hayas pillado no tengo que perder las formas.
Lo siento Dulcinea, no tenía que pagarla contigo.
Espero puedas disculparme, he tenído un día realmente malo y he estado muy nerviosa.
Un saludo.

Al Neri dijo...

¿Pero qúé le ha pasado, lady Marian?, ¿qué susto ha sido ese?

marian dijo...

El Sr.E ha tenído un accidente Sr.Neri. Ha quedado al final en alguna lesión que con reposo y medicamentos curará.
Pero ha sido una tarde complicada créame.
Repito que lo siento Dulcinea, pero me pillaste en el disparador con tu comentario y metí la pata, ahora que tengo a todos acostados y descansando se me vino el susto encima de mala manera.

marian dijo...

¿Qué pasa ultimamente con los comentarios en los blogs????? Tardan muchísimo en aparecer ¿no?

Miguel dijo...

Boooz,

la suyo es la insensatez extrema, la falacia y el progreargumentario.

La mayor eficiencia, a mismas condiciones de todo lo demás, siempre es mejor. Te deja más recursos para hacer lo que sea que sea lo siguiente, o sencillamente te libera de necesitar generar más recursos para continuar con tu actividad.

No sé lo que le han hecho a usted los africanos. Pero desde luego acabar con ellos no es la mejor opción para acabar con el hambre en África, porque tiene un ligero efecto secundario: acaba con los africanos. Inventarse esta chorrada y presentarlo como si fuera una argumentación inteligente ¡¡Ahórreselo!! para progres y víctimas de la Logse. Se supone que en la pluma hay que dar más nivel que esto.

Errar es humano. Y desde ese punto de vista, ser un retrógrado por supuesto que es algo humano. Pero lo realmente humano es acertar. Y acertar comprende el aumentar el conocimiento y disponerlo siempre al objetivo de vida propio, para ser más eficiente y poder llegar más lejos.
Según su teoría, sería más humano hacer cardiogramas a oído, porque para qué usar un máquina si se puede desarrollar la sensibilidad en la auscultación. O habría que hacer todo el transporte con animales o tirando uno mismo de carros, porque para que usar mecanismos que consumen gasolina y obligan a contaminar. O para que usar calculadoras, con el encanto que tiene hacer sumas con papel y lápiz (lo contentos que se iban a poner los auditores).

Cuando uno dice 'es que tiene más merito hacerlo a mano', se suele olvidar que el mérito está en el desarrollo del conocimiento y la tecnología, que ha llevado 'cienes y cienes' de veces más esfuerzo que hacer algo directamente a mano. Obviamente se realiza como inversion, para facilitar la tarea posteriormente.

Yo uso un ordenaor 'pa tó', y le aseguro que no dependo de él 'pa ná'. Porque sigo manteniendo perfectamente al día mi capacidad de hacer las cosas a mano. Eso sí; gracias a la mecanización que alcanzo (eficiencia) me puedo permitir el lujo de ayudar a muchos de los que tengo a mi alrededor. A mano no podría.

En fin... le recomiendo encarecidamente, como a tantos, la lectura del libro 'Como ganar una discusión: el arte de la argumentación', de Nichola Capaldi, que encontrará, por ejemplo, en la Casa del libro. Que no le engañe el título: el libro es un sencillo y muy comprensible compendio de la lógica aristotélica y de las trampas y bombas lógicas utilizadas en las discusiones; no sirve para ganar discusiones, sirve para no perderlas tontamente y que no le engañen a uno. Así, si es usted honrado -que supongo que al menos lo pretende- podrá dejar de decir burradas. Incluso se puede volver inteligente y hacerse de derechas. O hasta volverse de ciencias!!!

Aprendiz de brujo dijo...

Marian me alegro que todo haya quedado en un susto.Ya sabes esta noche a celebrarlo con una cenita de los tuyas..
Dulci, por qué no te encargas tú de reconducirme al lado bueno. Me encanta cuando te me pones respondona.
Apuesto a que hay fuego debajo de esos vaqueros y esas gafitas de catequista.
Un beso gatita.

Boooz dijo...

Sr. Miguel: No sabe cuaaaanto le aprecio. Soy pobre en estudios y seguro que no le alcanzaría ni a la milla en una discusión.

Aristóteles me suena a futbolista griego y el tema de la lógica... bueno, pues si algún día me entra por ahi, pues quizá... Ahora bien, si no me conoce, por favor, ahórrese las etiquetas.

Y si de mi comentario deduce (o induce, no sé, soy torpe) una ideología, ya me comentará las premisas (se dice así?). ¿Modus ponens o modus tollens?. No sé, no sé. Seguro (convencido estoy) de que es usted más listo.

Y usted, por otro lado, pone palabras en mi boca que yo no he dicho... e incluso las entrecomilla: ¿es un consejo que sigue de ese libro que me recomienda? ¿Esa es la forma correcta de argumentar? Vaaaya. Debe ser muy bueno...

Yo sólo le hago una pregunta, secilla, claro, a mi nivel ¿usted responde a personas o a las caricaturas que se hace de ellas en su mente? Su enciclopédico cráneo tendrá respuesta para estas dudas que me asaltan, y para muchas más.

¿Y dice usté, entrando al tema, que lo más eficiente es siempre lo mejor...? En los libros de lógica deben llamar eso una aplicación universal que arrancaría dicindo "todo...", pero me faltan objetos (se dice así, ¿no?) donde verificar esa afirmación. Yo, perdóneme si le ofendo con mi comentario, dudo que esa afirmación que hace usted sea verificable (¿Conoce a un tal Popper?). Para que comprobara en sus carnes, experiencialmente, las consecuencias de lo que dice, me gustaría verle trabajando en una fábrica a finales del s.XIX. Por cierto, ¿ha visto Matrix? (la primera, que es la buena) Es todo un tratado para iniciarse a la eficiencia. Tambiénlo es una versión más moderna de un libro muy popular más antiguo, llamado "Yo Robot".

Lo más eficiente para la industria farmaceútica es que usted se ponga constantmene enfermo, o que se declaren pandemias inexistentes. Lo más eficiente para un médico es que usted se opere "estéticamente" cuando no lo necesite. Lo más eficiente para un mercado es que usted consuma no cuando lo necesita, sino cuando se le ordene. Lo más eficiente es que usted no tenga libertad. No había nada más eficiente que el sistema comunista, donde gran parte la individualidad se anulaba en aras del beneficio del sistema (me contaron algo de un libro llamado Archipiélago Gulaj, de un tal Alexander, pero no recuerdo mucho más, me gustan más los cómics).

En fin, siento ser tan pobre en mis contenidos, pero mi ignorancia no me permite decirle muchas más cosas. Por último insistir en mi alto aprecio hacia usted y animarle a seguir escribiendo en este medio y otros.

Por cierto, hay un clásico llamado el Deaño. Seguro que le encanta. No lo venden en los aeropuértos.

ignatus dijo...

¡Joder, con Miguel, qué carácter! ¿Se le habrán acabado los All Bran o también estará afectado por el accidente del Señor E?

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Del asunto en cuestión, a mí las que me molan son las agendas de Hello Kitty que son superguays y tienen a un gato con lazos así como en mitad de cada página, pero son muy listos y lo han pintado poco, y así cuando tú pones la cita con el Raúl pues sí que se lee porque el boli marca más.

Además el gato ese unos días está alegre y otros como tristón, tipo emo. Y claro, está guay, porque así pones las cosas chulis en las páginas bonitas y las malas en las otras, y así está todo muy bien organizado.

Yo suelo apuntar las fechas de los exámenes (en las páginas con gato triste, claro). Lo malo es que cuando llega el día del examen, es cuando leo que lo tengo pero ya no me da tiempo a estudiar y por eso me han quedado todas. Pero para las citas con las amigas para pegarnos en el parque y eso, pues está bien, porque sí te da tiempo a ir.

Fin.

Fdo. La Vane

Boooz dijo...

Srta. Marian: desde la distancia me alegro también que todo haya quedado en un susto. Espero que todo se encauce correctamente, y ánimo con los gemelos.

Al Neri dijo...

Marian, espero que se recupere lo antes posible.

Miguel dijo...

ignatus: es usted casi un genio. Se me habían acabado los Al Bran, pero gracias a usted he recordado que en el armario del comedor guardaba otro paquete. Y tras diez días de continencia, digo abstinecia, me he podío apretar un buen tazón p'al cuerpo. Slurp, que güeno.

Sr. Boooz: insiste usted en dinamitar su propia imagen. Aquí el único que quita y pone palabras para inventarse las frases del otro es usted. Además su barato ataque 'ad hominem' no merece ni llamarse tal, por lo mal ejecutado.
Y para guinda, la demostración de que ni siquiera sabe qué significan las palabras que usa. De muestra un botón: 'Lo más eficiente para la industria farmaceútica es que usted se ponga constantmene enfermo...'. Querrá usted decir que es lo más conveniente, que no tiene nada que ver con eficiente. Aquí la palabra eficiente no tiene significado plausible alguno.
Así que voy a extender mi recomendación a que se lea (por partes, no se empache) el diccionario de la R.A.E.; empezando por el término 'eficiencia'. Que hará bien en contrastar con 'eficacia' (ya que luego muchas veces se confunde, y seguro que usted es de esos).
Cuando por fin sepa lo que significan esos términos, igual la discusión tiene algún sentido.
Un abrazo.

P.S.: lamento el retraso en la lectura y consideración de sus mensajes. Pero es que he tenido que ir al centro de salud, y como les ha dado por hacerlo 'más humano' (sin importar la eficiencia), no me han dado cita, sino que he tenido que esperar cola preguntando por el último; mi ficha la han tenido que rescatar de los archivos del sótano, la receta me la han dado en papel verjurado haciendo caligrafía; y para colmo el medicamento era una fórmula magistral de hierbas, también de realización 'más humana' que una impersonal pastilla de factoría química, con lo que también he salido tarde de la botica.

Anónimo dijo...

Sr. Boooz, mucho heavy, mucho tatuaje... pero en el fondo es ud. todo un detacho de elegancia con su Moleskine (marca que he conocido grcias a ud.).

Al Neri dijo...

Sandra, a mi también me extrañó un poco que un heavy irreductible utilizaba Moleskine, pero ya ve la teórica que nos ha dado :-)