lunes, 28 de junio de 2010

EL "USTED" EN "LA PLUMA VIPERINA"

El día antes de inaugurarse La pluma viperina, los miembros del entonces Cuatriunvirato acordamos que cuando cualquier cuatriunviro se dirigiera a otro lo haría en el más riguroso usted, reservando el tú para los comentaristas. El motivo no fue otro que dar un toque especial y diferente a la bitácora y brindar un pequeño homenaje al tratamiento formal, hoy prácticamente extinguido.

A la semana siguiente aparecía el post De usted, en el que yo defendía firmemente el trato en tercera persona con cualquier desconocido, de cualquier edad, "que no nos hubieran presentado en contextos de amistad o de ocio".

Para rematar, algún cuatriunviro extendió por su cuenta la fórmula a cualquier participante del blog, añadiendo “señor” cuando se refería a alguien del equipo de redacción.

En poco tiempo, casi nadie “se atrevía” a hablar de tú en la zona de comentarios, e incluso en otros blogs, para mi sorpresa, comenzaron a llamarnos "señores" al Subdire y a mí.

Lo que al principio parecía un poco incómodo, nos acabó encantando porque, como digo, daba una nota distintiva al blog, pero sobre todo porque gracias a este formalismo se suavizan y resultan elegantes –y divertidos- hasta los debates más virulentos. Creo que esta formalidad simbólica, y por supuesto voluntaria, ayuda a mantener las formas y el respeto entre los comentaristas.

10 comentarios:

Anónimo dijo...

A mi lo de tratarles de uds. me resulta gracioso. Nada más.

Pienso que eso de que con el usted "se suavizan y resultan elegantes –y divertidos- hasta los debates más virulentos", creo que es pasarse... Que te digan "ud. es gilipollas" o insinuaciones semejantes, elegante, elegante no queda... y delicado, lo que se dice delicado tampoco...

Pero lo mismo sucedería si en vez de decirle a otro comentarista "creo que ud. padece cretinismo", en vez de decirle "eres un cretino", pues tampoco se cumple la regla de la elegancia y la suavidad... aunque gracioso queda un rato.

Y mi teoría se confirma viendo los debates parlamentarios, allí los insultos y las acusaciones son constantes, como constante es la utilización de los terminos "usted" y "señorías".

Álex dijo...

Estimado Sr. Neri, le doy la razón en que las correctas formas pueden ayudar en ocasiones a suavizar y hacer más elegante un enfrentamiento. Matizaría que lo que realmente funciona es que las formas correctas sean una traslación de un fondo correcto. Suelen resultar poco creíbles, como comenta Sandra, las formas correctas cuando se vislumbra un fondo de falta de respeto o de agresividad.
Y lo mismo sucede en sentido contrario: las formas y el trato de usted pasan a un segundo plano cuando se nota que existe respeto e interés en el interlocutor.

Rocco Lampone dijo...

Diga usted que sí, Sr. Neri. con dos cojones!!!

EL FRANCOTIRADOR dijo...

Tanto con el señor subdirector como con usted señor Neri he alternado el tuteo y el usted,pero de un tiempo a esta parte,me decanto de forma definitiva por el usted,a pesar de la insultante juventud de todos ustedes.Estoy de acuerdo en que el "usted" de más empaque al blog.Hasta hay veces que con alguna dama he usado el "vos".

Isaak dijo...

Creo el que "usted" impone una distancia y permite una perspectiva del interlocutor que el más cercano y afectivo "tú" diluye.

Personalmente, cuando me dispongo a rebatir tajantemente un punto de vista o un argumento, me aflora el "usted" espontáneamente, supongo que como primer indicio al interlocutor de la diferencia de posicionamientos.

Conozco a dos que llevan este "marcaje" a límites casi cómicos. Son jefe y subordinado con principios y opiniones profesionales absolutamente encontradas, por lo general. Llevan años hablándose en tercera persona: "Don José ya debería saber que ésto puede resolverse si..."; "pues el Sr. Ramírez se equivoca puesto que...".

Así que todo lo que sea distanciarse cautelosamente del antagonista propicia un intercambio más libre y franco de opiniones.

Opino.

Aprendiz de brujo dijo...

A mi el usted, me parece bastante absurdo entre pipiolines y semidelincuentes como nosotros.Me produce risa más que otra cosa. Jamás se lo escatimo, (el tratamiento de Don tampoco) a una persona mayor.

ignatus dijo...

Yo estoy muy mal acostumbrado y tuteo a todo Dios (bueno, a los viejos de senectud evidente no).

Y en los foros, especialmente en este, intento tratar de Usted a aquellos comentaristas ocasionales. Pero en la práctica, por la falta de costumbre y mi debilidad mental, termino mezclando "tuteos" y "ustedeces" incluso en la misma frase.

Pero sí que creo que el rigor en la expresión puede hacer que se contengan un poco las malas formas al dirigirnos entre nosotros (Ustedes y yo).

Saludos.

Isel dijo...

Pues el usted es algo que lamentablemente se está perdiendo, y me parece una falta de ceducación y cortesía con desconocidos, sobre todo con gente de más edad. He e confesar que con gente de mi misma edad me cuesta más. Lo que nunca compartiré es en una tienda o en esos en su mayoría infames servicios de atención al cliente que nos digan directamente "¿Que quieres?" uy... les trato de usted a ver si se dan cuanta pero no... Un poco más de educación y buenas maneras en el cole no nos vendrían mal.
Tratarse de usted en el blñog cuando los que "conversan" ya se conocen igual es algo que peca de exceso. Llevar esta buena costumbre al absurdo puede ser malo.

Dulcinea dijo...

A mi me hace gracia pero no me sale. Hace tiempo lo intenté pero al final acababa mezclando l tu y el usted y lo deje por imposible.

Gazmoño dijo...

Vaya no sabia que estaba este debate aqui, es que este blog tiene ya unos añitos.
Pues supongo que el tú y el usted es sólo una cuestión de opiniones y preferencias.

Yo soy un hombre muy mayor, no pienso decir la edad, pero pinto canas, dicho pedantemente, pero no me gusta que me llamen de usted, a pesar que soy mas serio que un testamento, solo a las personas que no considero dignas les exijo que me hablen de usted, a todas las demás le pido amablemente que me tuteen. A mi creo recordar que me enseñaron que el usted era para los extraños y los de mayor edad, y sobre todo los ancianos.

en mi familia ni a mis padres ni a mis tíos no los hemos llamado nunca de usted, no lo permitian, decian: yo no soy ningún extraño para que me hables de usted.

En las familias donde llamaban a los papas de usted a mi me parecían muy cursis y ridiculos.

con todo lo dicho ya queda claro mi preferencia por el trato más cercano y cálido de tú. Considero que la verdadera elegancia y el respeto y saber estar es una cuestion de fondo, no de formas.
Pero si aqui la norma es de usted y de señor, no tendré ningún problema en trataros de usted, a no ser que se me escape algún tu, pero desde ya os digo que el exceso de formalismo lo encuentro muy incómodo, y mas que distincion, pedanteria.