viernes, 2 de octubre de 2009

DÍAS DE LA SEMANA

Mi día favorito de la semana es el viernes. Aunque trabajo por la mañana y suele ser una jornada de bastantes marrones, ya que debo dejar cosas listas para una reunión del lunes y la gente me lo trae todo a última hora, el día previo al fin de semana siempre llega pleno de expectativas de un largo descanso, que después se hace muy corto, pero de ilusiones también se vive. Es el día de la esperanza, en el que piensas todas las cosas que harás el finde y en el que despides por un par de días a los madrugones, a los horarios rígidos y a las tensiones.

Sin embargo los viernes suelo estar demasiado cansado de toda la semana como para plantearme hacer nada especial por la tarde o por la noche. A veces salgo a cenar algo, pero lo más habitual es que me quede en casa viendo una peli y tomándome un Barceló-Cola.

A diferencia de la mayoría, considero que el lunes no es tan malo. Yo es el día que menos me cuesta madrugar, ya que estoy muy descansado de dormir más horas las últimas dos noches, y suelo afrontar mis obligaciones con más energía y optimismo. Además, como ya he dicho, la agenda de este día ya la dejo medio rematada el viernes pasado y los compañeros que me generan trabajo suelen estar más perezosos, pensando que todavía tienen toda la semana para sacar los asuntos adelante. Esa frase de “estoy de lunes” a mí no se me puede aplicar.

Pero el día malo, malo, el peor de todos, es el domingo
. Si el viernes es expectativa, el maldito domingo es despedida de lo bueno. Y ya es triste, pues deberían ser 24 horas de descanso y relax, pero aunque el cuerpo descansa, la mente anda inquieta, gruñendo porque ya se acaba la fiesta. Es una sensación de malestar que comienza más o menos a mediodía o después de comer, pero que te jode el domingo. En mi caso la cosa se agrava, ya que dedico toda la mañana a las engorrosas tareas de limpieza, y así no hay forma de disfrutar.

A última hora del domingo siempre acudo a Misa y después a lo que mis amigos y yo denominamos humorísticamente “café misero”, una reunión institucionalizada desde hace años en un bar céntrico. Los asistentes al café misero nos juntamos invariablemente en la puerta de la iglesia. Algunos salimos de oír misa y otros vienen solo a la salida, a tomar algo. Este par de horas suele ser muy entretenido y nos libra de la “angustia vital” de las últimas horas de libertad. Normalmente hacemos balance de lo sucedido el sábado, nos ponemos al día de los últimos escándalos sentimentales (que en mi grupo los hay en abundancia), programamos la “caña entresemanera” (que normalmente es el jueves, para hacer la quiniela) y nos quejamos lastimeramente de lo chunga que será la semana que nos espera.

Al salir de la cafetería yo siempre estoy muy jodido pensando en el madrugón del día siguiente (aunque sea lunes).

12 comentarios:

El Subdirector del Banco Arús dijo...

Vaya, vaya, sr. Neri, así que dándole al Barceló por las noches. ¿Quién le ha visto y quién le ve?

No, en serio, para cambiar un poco, le recomendaría que usara la Coca-Cola en versión ligth que le da un mejor sabor al Barceló o, incluso, que probara el ron Matusalem. Ya verá.

Las cosas que le suceden a usted me pasaban hace años, en mi época de estudiante, cuando odiaba el domingo por la tarde que, usualmente, solía dedicar a estudiar y preparar cosas para el resto de la semana. De hecho, todavía me deprime un poco incluso oír un transistor retransmitiendo los partidos del domingo. Es un sonido que tengo asociado a mi niñez y al estrés que ya entonces me producía estudiar. Exceso de responsabilidad, supongo.

Yo duermo muy mal los fines de semana. El viernes me suelo ir por ahí con mis colegas. Normalmente, decimos que sólo vamos a tomar una caña y a veces volvemos a casa con unas cuantas copas encima y a las tres. Encima el sábado a las diez o diez y media solemos quedar para hacer deporte y, más de una vez, hemos acudido con una resaca del quince. Cuando no habiendo dormido dos horas y casi tambaleándonos.

Así, me quedo roto para todo el fin de semana; desando, casi que llegue la estabilidad de las obligaciones.

Rocco Lampone dijo...

Estimado Sr. Neri, me sumo al Sr. Subdirector, y paso a recomendarle el Ron Dos Maderas, o el Ron Appletone; eso sí, yo soy ferviente devoto de tomarlo con limón, no con cocacola.

A mí el fin de semana me pasa en un vuelo. Noctámbulo como soy, suelo trasnochar aunque no tenga nada que hacer (siempre acabo liándome con cualquier cosa), con lo que el sábado, si no lo remedia nada ni nadie, suelo dedicarlo a dormir un poco más.
Algo de limpieza y, si se tercia, pues cañitas o copitas, o ambas cosas.
El domingo suele ser día de tareas familiares, visita a mi abuela, comida con mis padres, y por la tarde, a sufrir viendo al Valladolid (nefasto este año)
Y, gruñendo, a esperar, pues detrás de Plácido Domingo viene Jodido Lunes.

Al Neri dijo...

Tomo nota de las sugerencias para los cubatas. Yo siempre uso Pepsi. Con limón, me da mucha acidez.

Aprendiz dijo...

jajaja Al Neri, yo esos traumas no los tengo desde que acabé el colegio, será porque si el lunes no tengo ganas no voy a la Uni... Exceso de irresponsabilidad, supongo ;-)

El domingo por lo general siempre ha sido el peor día, a pesar de que intento no levantarme muy tarde aunque haya salido por la noche, por la tarde está la Misa y al llegar la noche el agobio porque no he tocado un libro y encima tengo que recoger la habitación... se pasa volando y no lo aprovecho nada.

lidia dijo...

Tal y como explicas tu fin de semana no parece que sea muy agradable,tumbarse en el sofá a ver la tele durante horas y horas,como dice una gran amiga que tengo es como sentarse a la puerta de tu casa y ver la vida pasar,claro que quizá se deba a que eres de la zona norte,eso por el sur es algo casi prohibido y aprovechamos el fin de semana para descansar y pasarlo bien,antes pasarlo bien que descansar,aunque realmente nosotros aunque tengamos fama de vagos,trabajamos todos los días y no tenemos favoritismos por un día u otro,todos pueden ser igual de buenos,plenos y divertidos.

Anónimo dijo...

El mejor ron es el Brugal o el Cacique, aunque donde este el whisky JB que se quite lo demas, jejeje...Bueno, al margen de bebidas, el viernes para mi tambien es el dia de la esperanza, el sabado el de la fiesta y el domingo el del futbol.

Al Neri dijo...

Lidia, yo no veo la tele. Sólo cine. Y no durante horas (sólo una o dos pelis algunos viernes que estoy muy cansado como para salir)

Por cierto, señor Subdirector del Banco Arús, ¿como que quién me ha visto y quién me ve? No creo que haya sido abstemio nunca (tampoco especialmente bebedor). En cambio usted, por lo que cuenta, es un viciosillo.

Mis peores domingos eran en la época en que me encontraba destinado en los confines del Reino, que tenía que viajar por la tarde, así que el domingo duraba mucho menos.

Guerrera de la LUZ dijo...

Me he reído muchísimo leyendo los comentarios Al Neri... me troncho, cada uno recomendando una marca de ron...

Pues yo lo último que he descubierto, ya que de bebidas va la cosa xD es el destornillador con vodka Exquisite de Wyborowa. Aún estoy alucinada.

Hombreeee el domingo no es tan malo, peor es el martes no?¿ que es como anodino y queda tooooda la semana por delante... el domingo mola, aún te puedes echar la siestecita, ir al cine por la tarde, cenar por ahí, dar un paseo ... no sé. Para mí el peor es el martes y el mejor el sábado.

Besos matutino-dominicales :)

Paco dijo...

Señor Neri ¿Tareas de limpieza? ¿Acaso no las hace su señora esposa? ¿En que se está convirtiendo esto?

El Subdirector del Banco Arús dijo...

Pues para que vea, sr. Neri. Ayer a las 22.15 había quedado para tomar sólo unas cañas. Al final llegué a casa a las cuatro de la mañana con varias cervezas encima, un par de cubatas (uno con ron Santa Teresa Selecto), dos chupitos (un Mussolini: Malibú, Pipermint y Granadina; y otro de vodka, ginebra, ron, tequila y salsa de tabasco) y una cerveza Hoegaarden.

Y hoy me he levantado relativamente pronto (8.30), me he ido a hacer casi una hora de gimnasio y otra de squash así que estoy hecho puré para el resto del fin de semana.

Esta noche, otra vez lo mismo y, quizás mañana, a echar a una carrera.

¡¡¡Qué ganas tengo de que llegue el lunes para descansar!!!

Mª Ángeles dijo...

Pero así no te relajas y no disfrutas del tiempo libre y el café, piensa que todo llega demasiado rápido y relájate disfrutando de esos pequeños placeres que nos podemos permitir.
Saludos

Guerrera de la LUZ dijo...

Anda que en un post sobre los días de la semana y yo no sé ni en qué día vivo. Ayer te dejé besos dominicales... juas. Es que me cogí libre el viernes y ya me perdí.

Besos dominicales (hoy sí) xD