Estos días nos han estado abrasando desde varias cadenas televisivas con la inhumana paliza que una adolescente española ha propinado a una chica ecuatoriana, hasta dejarla inconsciente, en la localidad madrileña de Colmenarejo.
Sin entrar en los motivos del incidente, si es que los hay, no he podido menos que escandalizarme una vez más de la desvergüenza y la hipocresía de que hacen gala los medios de comunicación. En todos los noticiarios han condenado con vehemencia la agresión, han alarmado sobre la violencia juvenil, han sacado a los maderos "especializados" opinando del tema y, sobre todo, han despotricado sobre lo cruel, lo morboso y lo delictivo que es no sólo grabar la salvajada con el móvil, sino colgar las imágenes en internet. Pero lo cierto es que si la espeluznante paliza la conocemos todos, no es precisamente por haberla visto en YouTube esta semana, sino porque los hijos de puta de los periodistas nos la han puesto a todas horas, hasta la saciedad, sin omitir un detalle ni una frase. El dichoso vídeo lo ha sufrido toda España y no por culpa de los malvados jovencitos que lo grabaron y publicaron en la red, sino por obra y gracia de los enfermos, degenerados e inmorales responsables de Antena 3 -que se ha cebado- y demás cadenas.
A vosotros, "periodistas", desgraciados, sí que había que meteros en la cárcel por fomentar la violencia y no tener ningún respeto por nada ni por nadie. Y lo que tendríamos que hacer los telespectadores es dejar de contemplar vuestra basura y vuestras paridas, que son un atentado continuo contra la ética, el buen gusto y la decencia, y no encender la tele más que para ver pelis con el DVD.
Sin entrar en los motivos del incidente, si es que los hay, no he podido menos que escandalizarme una vez más de la desvergüenza y la hipocresía de que hacen gala los medios de comunicación. En todos los noticiarios han condenado con vehemencia la agresión, han alarmado sobre la violencia juvenil, han sacado a los maderos "especializados" opinando del tema y, sobre todo, han despotricado sobre lo cruel, lo morboso y lo delictivo que es no sólo grabar la salvajada con el móvil, sino colgar las imágenes en internet. Pero lo cierto es que si la espeluznante paliza la conocemos todos, no es precisamente por haberla visto en YouTube esta semana, sino porque los hijos de puta de los periodistas nos la han puesto a todas horas, hasta la saciedad, sin omitir un detalle ni una frase. El dichoso vídeo lo ha sufrido toda España y no por culpa de los malvados jovencitos que lo grabaron y publicaron en la red, sino por obra y gracia de los enfermos, degenerados e inmorales responsables de Antena 3 -que se ha cebado- y demás cadenas.
A vosotros, "periodistas", desgraciados, sí que había que meteros en la cárcel por fomentar la violencia y no tener ningún respeto por nada ni por nadie. Y lo que tendríamos que hacer los telespectadores es dejar de contemplar vuestra basura y vuestras paridas, que son un atentado continuo contra la ética, el buen gusto y la decencia, y no encender la tele más que para ver pelis con el DVD.
Efectivamente es así,en primer lugar la niñata que hizo esa salvajada tendría que estar entre rejas,pero no por hacérselo a una persona extranjera sino porque es eso una salvajada,esta escoria humana no es una víctima de la sociedad,porque si la agresión hubiera sido a un español entonces no se habría divulgado tanto,imaginémosnos que cada vez que un extranjero que comete un delito tuviera que salir el embajador del país correspondiente a pedir perdón,estarían siempre en los medios no como el tonto del embajador de Ecuador que ya ha pedido explicaciones.En cuanto a lo de la televisión tienes toda la razón,pero esta es una basura porque la gente lo ve si no lo viera la programación sería muchísimo mejor,el hecho de que los programas de mayor audiencia son los más repugnantes habla a las claras de lo repugnante que es nuestra sociedad,por eso no es casualidad que hayan estado saliendo terroristas durante los últimos 30 años de las cárceles y a la gente no le ha importado nada.
ResponderEliminarEs curioso que después de tratar ciertos contenidos de dudosa por no decir nula ética, despreciando la libertad individual de elección de forma de vida, despreciando lo orígenes étnicos de ciertas razas, todo bajo una estricta generalización etc, etc, etc. En su blog y con total libertad de expresión excepto salvo en el caso de Azaroso, y algún que otro exaltado disidente lejano a sus ferreas y unilaterales convicciones, han vertido opiniones que particularmente me han provocado vergüenza ajena llegando a veces con premeditación a lo ofensivo, no por lo malasonante de las palabras utilizadas sino por los contenidos que tan vehemente han defendido, aunque habrá quien no lo considere así y es respetable.
ResponderEliminarMe parece un poquito ridículo por su parte Sr. Neri que se escandalice a estas alturas por la libertad de expresión de la que usted hace total uso y que insulte abiertamente a todo un colectivo profesional, proviniendo usted de un colectivo de consabida fama de vileza y poca ética... Léase a sí mismo en sus amplias y argumetadas manifestaciones y a sus compañeros de pluma, (curioso nombre para un blog homófobo) y pregúntense hasta qué punto están ustedes mismos libres del pecado, del mismo al que ha lanzado usted esta piedra... El tema es diferente pero el trato dado no dista tanto caballero.
Una diferencia clara es que nosotros no nos ganamos la vida machacando las de otros.
ResponderEliminarEl periodismo no es mi profesión y cualquiera que entre en este blog sabe que va a leer opiniones estrictamente personales y viperinas y no a leer un periódico o a informarse de manera más o menos objetiva sobre lo que ha pasado.
Estoy de acuerdo con Neri. Deberíamos encender la tele sólo para ver pelis en DVD (a ser posible, piratas) y usar los periódicos sólo para encender las brasas de las barbacoas.
Menuda profesión la de periodista... Creo que es más lícito ser, incluso, sicario.
Pantera, sin entrar a debatir tus opiniones personales sobre los contenidos de "La pluma viperina", ni tu comprensible defensa del gremio periodístico, yo sólo te pido que me indiques a qué colectivo "de consabida fama de vileza y poca ética" pertenezco, pues sinceramente no caigo.
ResponderEliminarYo soy partidario de que a los agresores de esa niña, se les de una buena paliza, y si son niños como es el caso, una paliza proporcional a su edad, es decir unos cuantos guantazos y raquetazos en el culo.
ResponderEliminarSi no hay empatía debe haber miedo, miedo a que te hagan lo mismo que tu haces a los demas, así la próxima vez que a esa hija de puta se le ocurra golpear a alguien se lo pensará trescientas veinticinco veces.
Mano dura, más mano dura, si yo no me he convertido en un hijo de puta es gracias a que mi padre y mi madre me han hecho crecer recto y cuando me he desviado alguna vez en mi vida, mis padres no se han cortado ni un pelo en enderezarme aunque fuera necesario a veces un buen par de guantazos bien dados, y hoy en dia yo se lo agradezco.
LOs periodistas en general no me caen bien, no saben hablar, no saben escribir,viven del cuento...
Todo es fruto de la hipocresía y maldad existente en nuestra sociedad.
ResponderEliminarPor un lado, tal y como dice "el fracotirador" me da la sensación de que todo el bombo que se ha dado a la noticia ha venido originado más por el hecho de que la agredida era extranjera que por la agresión en sí. Que conste que no estoy defendiendo a la agresora: a esa sinvergüenza le hubieran venido bien un par de tortas a tiempo. Pero claro, hoy en día los padres no pueden dar un sopapo a sus criaturas porque los denuncian por agresión. Y los padres tienen miedo de sus propios hijos. Así nos va. Los críos de hoy no respetan nada.
Por otro lado, la televisión de los últimos tiempos es basura. El periodismo de hoy, en muchísimos casos, consiste en buscar mierda en la vida de los demás y sacarla a la luz, dando lecciones de moralidad sobre cómo no hay que ser.
En fin, yo he optado por bajarme pelis y series de internet. Y para estar informada, a leer el periódico.
Pero bueno, jamás he entendido a la gente que denosta una profesión sin argumentar, generalizando acerca de la misma y siempre sin conocer los entresijos del oficio.
ResponderEliminarEl caso es que este virus está muy extendido por España.Aquí todos los profeionales tiene mala fama:
los abogados fama de ladrones y sinvergüenzas; a los médicos hay gente que no acude,(o por lo menos así lo manifiesta) casi por principio; los psicólogos fama de engañabobos; el otro día oí despotricar de los arquitectos a una fulana de forma gratuita y estúpida; los funcionarios ya ni te cuento...Pero que cojones pasa. En todos los colectivos hay buenos y malos profesionales y hablar sin tener ni puta idea es gratuito.
Se dice Colmenarejo, no Colmarejo Sr. Neri
ResponderEliminarAmén.
ResponderEliminarYo no he visto la noticia. Gracias a Dios he sufrido una de esas lagunas informativas que se sufren cuando te encuentras de vacaciones, aunque sí he visto el vídeo en una de esas repeticiones veraniegas tan habituales, y no sabía que había sido "la noticia de la semana". Me ha recordado al caso de la agresión en el metro este invierno.
ResponderEliminarY es que parece que cuando a los medios de comunciación, especialmente televisiones, les cae una noticia como esta, la exprimen hasta donde pueden, haciendo uso, eso sí, de la ética farisaica de tapar la cara a los menores, mantener ocultas sus identidades, etc.
Yo creo que más que los periodistas, la culpa es de los altos cargos de las empresas de comunicación, que buscan exclusivamente hacer dinero, y no informar. En la mayor parte de los casos, imagino que los periodistas serán meros trabajadores que se limitan a dar las noticias que les llegan, sin tener poder de decisión sobre las mismas.
Me llama la atención por ejemplo, que siempre se den las noticias de agresiones a extranjeros, y otras noticias que podrían causar mayor "escándalo" en la socidad, como el caso de los restos descuartizados de un feto humano que fueron enviados a un medio de comunicación (intereconomía), noticia de la que sólo se hizo eco dicho medio de comunicación, y creo que ningún otro.
Respecto a la educación de los niños, estoy de acuerdo con hispanicus y yomismamente. Se ha llegado a un punto en el que los niños han aprendido a dominar a progenitores y maestros con la amenaza de la denuncia por malos tratos. Cuando estaba en el colegio muchos maestros decían que un cachete a tiempo podía ser la mejor medicina, y creo que tenían toda la razón. Aunque en aquellos momentos pudieran doler (más moral que físicamente) en muchas ocasiones son una buena herramienta educativa.
Completamente de acuerdo en que la programación que hay en la televisión es cada día más repugnante y merece menos la pena perder el tiempo delante de ella.
ResponderEliminarMe recuerda a aquella frase que dice: "Cuanto más pienso (de comer), menos pienso (de cabeza)." Parece que se busca que la gente deje de pensar cebándola a programas basura, prensa rosa y violencia.
Pero no creo que haya que acusar de ello a los periodistas y me parece increíble que generalicen tan libremente echándoles la culpa de todo. Habrá excepciones como en todas partes, pero en general considero que son profesionales tan dignos de respeto como ustedes.
Yo también creo que el problema viene de más arriba, de los que dirigen los medios de comunicación y en este caso concreto los informativos, que ponen su prioridad en la audiencia (que equivale a dinero en publicidad) en lugar de informar. Y por tanto dan al pueblo lo que "se supone" que este quiere... en este caso, imágenes de violencia y cuanto más explícitas, mejor. Y es que no se libra ni una cadena... en todas te muestran lo mismo.
Y les parecerá extraño, pero yo todavía no he visto ese vídeo porque no he querido verlo. Porque no me apetece tragarme la violencia que me regalan gratuítamente a la hora de comer.
Coincido con Veneficus en su interpretación de que los culpables son los altos cargos de las empresas de comunicación. En realidad cuando hablo de "periodistas", me refiero a ellos precisamente, al "lobby" de los mass media, a los responsables del Cuarto Poder, y no a los pobres asalariados que redactan el reportaje de turno y se adaptan veces a la línea editorial si no quieren hacer cola en el INEM.
ResponderEliminar